Veo en las estrellas el resplandor de tus ojos,
y en el cálido atardecer tus mejillas sonrojadas,
en la noche el color de tu cabello,
en la luz del sol veo tu sonrisa.
¿Acaso hay mujer mas bella que tú?
me quedaría corto al tratar de describirte
pues tienes la frialdad del invierno,
la belleza de una flor en primavera
el aroma del viento en otoño
y el resplandor de una tarde de verano.
Dios puso su mano en este mundo,
y con todo su amor, y su cariño
creó a la mujer, te creó a ti
eres como una joya en manos del altísimo
un cofre lleno de perlas y esmeraldas.
No hay comparación alguna,
entre la noche, el atardecer, y tu belleza
puesto que eres sin duda,
la mas hermosa y dulce princesa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me gustaría saberlo
En la dulzura de la noche, En lo incierto del futuro En el sinsabor del día En la ausencia de felicidad, Toma mi mano de repente Esta auster...
-
Nos hemos abandonado A la nostalgia A la sombra del olvido Que degenera y carcome. Me has dejado tirado Cómo esperpento de invierno A Merced...
-
Sólo quédate un instante, un breve instante en que respire y pueda percibir tu aroma, sé la misma de siempre que sonríe y me sonroja, Acérca...
No hay comentarios:
Publicar un comentario